#LVCRUISE

alluneedisfashion
30 may 2016
3 Min. de lectura

La espera terminó. El pasado sábado 28 de Mayo la cita del fin de semana fue en el MAC de Niterói a las 16.30 hs. Louis Vuitton presentó su tercera colección crucero y el desfile estuvo lleno de momentos perfectos que nos dejaron fotografías por las cuales no hacemos más que suspirar.

Como bien dije antes, el desfile tuvo lugar en el Museo de Arte Contemporáneo de Niterói, Río de Janeiro, Brasil. Se trata de una creación de estructura modernista color blanco situada al borde de un acantilado, la cual fue comparada varias veces con un ovni, diseñada por el arquitecto brasileño Oscar Niemeyer, quien también fue responsable de otras magníficas obras como la Catedral de Brasilia, el Palacio Planalto y Palácio da Alvorada.

El primer momento que me dejó sin aliento fue la apertura del desfile a cargo de Mica Arganaraz vestida con un maxi dress de figuras asimétricas y colores sólidos. Para quienes aún no la conocen, Mica es la modelo argentina en ascenso que está conquistando las pasarelas internacionales. Fue la encargada de abrir el desfile de la colección resort de Miu Miu y también es la cara de la última campaña de Prada, para la cual fue fotografiada ni más ni menos que por el talentoso Steven Meisel.

El segundo momento fue la perfecta sincronía de las modelos que, como si de un laberinto se tratara, se deslizaban por la extensa rampa que hacía de pasarela, con la Bahía Guanabara de fondo y la Montaña Pan de Azúcar al otro lado de la costa, reproduciendo una imagen cinematográficamente perfecta.

En esta colección Nicolas Ghesquiere jugó con la moldería desestructurando las prendas y convirtiéndolas en una danza de figuras que se manifestaban en colores intensos como el azul marino, amarillo, rojo, toques de violeta y el ya familiar verde militar. Y como las colecciones crucero son para las vacaciones de verano y por ende, la comodidad lo es todo, ni tacos ni vertiginosas plataformas estuvieron presentes en la colección. En cambio, las botas cortas de cuero al tobillo y en punta, combinadas en blanco y negro, se convirtieron en uno de los items de deseo. Al menos para mi!

No hay dudas de que Latinoamérica está entrando en el radar de europeos y norteamericanos. Primero, fue la histórica visita de tres días del presidente de Barack Obama a Cuba, con el objetivo de dejar atrás cinco años de enemistad y normalizar las relaciones con la isla. Le siguió, también en Cuba, el sorpresivo recital gratuito de los Rolling Stones, que brindaron un gran espectáculo nunca antes acontecido y movilizaron las calles de La Habana. Y finalmente la moda pisó la república socialista de la mano de Karl Lagerfeld, que eligió el Paseo del Prado para mostrar la reciente colección crucero de Chanel.

Ahora la mirada está puesta en Brasil, que, tras el desfile de Louis Vuitton, en la segunda mitad del año albergará a millones de turistas que visitarán el país sede de los Juegos Olímpicos 2016.

Definitivamente, como dijo Mick Jagger, los tiempos están cambiando. Latinoamérica está tomando protagonismo en el globo y, ¿Quién sabe? Quizás Argentina sea la próxima en tener los honores o, por lo menos, este movimiento impulse la industria nacional, ya que tenemos el talento para exportar pero aún no lo hemos sabido explotar.